21 de abril de 2011. Es común la concurrencia de Voluntarios de los Cuerpos de Bomberos a llamados originados por personas encerradas al interior de un ascensor en los diversos edificios de la Capital y en las grandes ciudades, donde este medio de transporte vertical de personas se hace recurrente y cómodo, situación que se genera en la mayoría de los llamados, por fallas en sus sistemas, lo que conlleva el necesario auxilio de personas externas para salir, ésto cuando no se puede solucionar rápidamente el desperfecto y los pasajeros deben permanecer encerrados por un tiempo indeterminado.
Hoy, Voluntarios de la Sexta del CBS, concurrieron a uno de esos tantos llamados que se repiten a diario, siendo específicamente en el Paseo Bulnes, en pleno centro de Santiago, donde tres personas quedaron encerradas en un séptimo piso y luego de permanecer, cerca de treinta minutos en su interior, sus compañeros que laboran en dicho edificio, solicitaron la ayuda a Bomberos para sacar a las personas afectadas, concurriendo el RX-6.
Pero la labor, si bien cotidiana, esta vez tenía un inconveniente adicional y es la antigüedad del ascensor, este databa de antes de 1960, situación que hizo del trabajo de apertura y rescate un poco más lento que lo habitual, en especial en una hora donde el conserje no se encontraba en su puesto, ya que desarrollaba labores propias de la administración, fuera del edificio.
Por diversos medios, se estableció el nombre de la empresa que efectuaba la mantención de dicho ascensor, el cual fue ubicado y logró llegar para apoyar el trabajo bomberil y así poder abrir las puertas del ascensor sin causar un daño mayor y poder sacar a las personas desde su interior, sin aumentar la angustia que sentían.
Lo particular de este tipo de ascensores es que no se abren con las tradicionales llaves con las cuales estamos acostumbrados sino que utilizando dos alternativas diferentes, si falla la primera.
Normalmente, y tal como lo señalara el Supervisor de la empresa, se debe realizar en primera instancia, la ubicación exacta del ascensor, para calmar a las personas que están en su interior y saber su cantidad y condición en la que se encuentran, situación practicada por los Voluntarios, como parte de la rutina. Acto seguido, se debe subir hasta la sala de máquinas del ascensor y proceder a cortar la energía eléctrica que alimenta el sistema y motores del ascensor, desde los tableros que allí existen, verificando siempre que ella se corte por completo ante de seguir con los procedimientos de rescate.
Lo anterior, se debe comunicar a las personas que están dentro del ascensor y el por qué se hace tal maniobra, para luego verificar con las mismas personas que el corte se haya realizado correctamente y si quedaron con luces de emergencias.
Luego, se procede a bajar el ascensor hasta el piso siguiente, siempre que no esté a nivel en el piso que quedó detenido, pues se dejará en ese piso y se procederá a destrabar la puerta.
Mirando la puerta del ascensor de frente, este no tiene ninguna apertura que permita introducir alguna herramienta para abrir dicha puerta, por tanto, utilizando un destornillador largo, se buscará en su parte superior izquierda, en el ángulo que forma el batiente izquierdo con el dintel, un seguro que apenas se nota que permite mantener cerradas las puertas. El papel que realiza el destornillador o herramienta similar, es poder mover dicha pieza hacia abajo, sólo un poco, para que permita soltar dicho seguro y de esa manera abrir la puerta. Esta maniobra es esencial hacerla bien, pues es la única forma de abrir dichas puertas sin tener que destruirlas. Como se observa en la fotografía, con la puerta totalmente abierta, el destornillador baja el seguro de la puerta.
La recomendación del Supervisor, señala que de no poder abrir la puerta en el piso que está el ascensor, entonces se puede proceder a subir un piso más y realizar la misma maniobra y de obtener éxito, entonces se procederá a subir al techo del ascensor, cuidando de pisar en los soportes para no dañar la maquinaria y estar en sitio seguro, y abrir la puerta mediante la utilización de la cadena del motor de apertura de la puerta del ascensor, de aquí la relevancia que éste se encuentre a nivel del piso y con la energía eléctrica cortada.
Si el ascensor no está a nivel, es posible que el dispositivo de seguridad del ascensor no permita la maniobra, ya que trabaja con esa finalidad, que la puerta no se abra si no está en el piso en forma correcta o nivelada y que ninguna persona pueda abrirla mientras el ascensor esté entre pisos. Asimismo, al encontrarse cortada la energía eléctrica, el motor del ascensor no se activará mientras estemos manipulando la cadena para abrirlo, lo que implica el riesgo de quedar con una mano o la ropa atrapada con su movimiento repentino. En la fotografía se observa el motor de apertura y la cadena que se debe mover.
Estas recomendaciones, en general, son aplicables a los ascensores que por su antigüedad sean de antes de 1960, los cuales normalmente encontramos en el casco central de la Capital y en algunos edificios antiguos de grandes ciudades.
No todas las personas se atreven a llamar al 132 para solicitar ayuda de Bomberos para estos casos, lo que implica que los afectados y encerrados permanezcan por un tiempo prolongado antes que personal técnico de mantención de ascensores sean ubicados y lleguen al lugar, o que Voluntarios del Cuerpo lleguen en su ayuda, pero lo claro es que al hacerse presente se debe actuar con profesionalismo y decisión, lo anterior es un recordatorio de cómo se puede abrir una puerta de ascensor, modelos que se encuentran en franca retirada, pero que aún hoy, prestan sus servicios a pesar de sus deficiencias, generando el conocido 10-3-1.
